Luego de múltiples retrasos y rumores de aplazamiento para 2026, finalmente el siete de marzo de este año, la NASA confirmó la fecha definitiva para la ejecución de la misión Artemis II.

(Imagen cortesía de la NASA y de Artemis-II )
Cinco décadas después de la primera ida a la luna, y con una expectación a nivel internacional, de personas tanto escépticas como curiosas, este regreso al satélite natural se preparó meticulosamente, cumpliendo un propósito distinto para lograr un alunizaje sin dificultades.




(Imagen cortesía de la NASA y de Artemis II)
Se llevaría a cabo la segunda etapa del programa espacial (Artemis II). En la primera se realizaron experimentos científicos alrededor de la luna, continuando el próximo desafío, que tendrá como tarea el sobrevuelo a la órbita lunar junto con una exploración profunda del espacio, empleando el cohete Space Launch System (SLS) y la cápsula de Orion.
A diferencia de la primera misión, esta contará con una tripulación de astronautas capacitados para este retorno. Similar a la misión Apolo 11, pero con más tripulantes, contando con cuatro astronautas seleccionados: Gregory Reid Wisman (Comandante), Victor Jerome Glover (Piloto), Christina Hammock Koch (Especialista) y Jeremy Roger Hansen (Especialista), entre ellos se distinguen Koch y Glover: la primera mujer y el primer hombre afroamericano en la historia que participarán en un proyecto lunar.




(Imagen cortesía de la NASA y de Artemis II)
Pero, ¿por qué retornar a la luna? Según el profesor José Luis Nilo de la Universidad de La Serena, se debe a una segunda competencia espacial entre las potencias de EE.UU y China, que ya posee una estación espacial, pero en términos generales, todo se debe a asuntos geopolíticos.
Sin embargo, de acuerdo a Andrea Castillo Flores, presidenta de la Asociación Astronómica del Norte de Chile, este retorno a la luna cuenta con pros y contras, siendo la principal ventaja el poder realizar despegues de cohetes con menores esfuerzos debido a la poca gravedad que hay en el satélite en comparación con la Tierra, al mismo tiempo que el inconveniente sería la exposición a los rayos x del sol y las partículas corrosivas que contiene la superficie lunar.




(Imagen cortesía de la NASA y de Artemis II)
La misión se llevará a cabo en noviembre del 2024, en la estación Kennedy Space Center en el Estado de Florida. El éxito de este arduo trabajo dará paso al último objetivo del proyecto de alunizaje de la NASA: el Artemis III, la cual finalmente realizará este anticipado retorno a la superficie lunar.
Bibliografía